jueves, 28 de abril de 2016

"BAJANDO AL SÓTANO" Exposición de Stradi Corleone

Stradi: Con Bajando al sótano, diafragmas sonoros, muestro mi trabajo de todo un año en la emblemática sala Jamboree, donde nos reunimos los amantes del jazz y de la noche barcelonesa.
Tardes de jazz acompañadas a ritmo de click. Son muchos los músicos que han pasado por esta sala y que junto a ella han crecido, músicos que empiezan, otros con muchos escenarios recorridos, pero tanto a unos como a otros los une la misma pasión, el jazz que corre por sus venas.
Luces tenues, altas luces, sombras que hacen de él un gran escenario
Sonidos que nos conducen hacia tiempos pasados
Magia que nos encumbra y nos hace soñar con idílicos parajes
Casa de Chet Baker, Montoliu y otros mas
Pasen y vean, os invito a soñar
Sábado  21/05/2016 
Galeria d'art Moraima

Cr. de la Verge nº1, local 2  
08001 Barcelona 

jueves, 21 de abril de 2016

Haciendo Fotografía Turística Personal

Las fotografías y textos de W.Scott Olsen
Hay una lección que aprender de la Mona Lisa.
Es sin duda el peor de la pintura presentada en el Louvre. Es alojado en la habitación más atractivo, con la peor iluminación. Hay una cuerda que mantiene a los clientes se acerquen demasiado. Una caja de vidrio protege de la atmósfera, la luz ultravioleta, el ataque de los alienígenas, el botulismo, la gripe y cualquier tipo de profundo agradecimiento.
Y sin embargo, aparecen las hordas. A menudo se siente como el espacio más concurrido en París. Los turistas, cada uno de ellos con un teléfono celular, presione hacia la cuerda y luego mirar lejos de la pintura, elevar su teléfono ligeramente por encima del nivel de la cabeza y disparar lejos. La maldita autofoto mil, cien mil veces al día. No importa lo incómodo que puede ser la habitación. La habitación es incómodo , porque la pintura es muy popular. El estado de ánimo ambiente es "mantenerse en movimiento." No se quede.No se involucre.
Sin embargo, el tema de la autofoto de turismo no es la obra de Da Vinci. El sujeto es el fotógrafo, que documenta su presencia en un lugar famoso. Aquí soy yo delante de la Mona Lisa. Media hora más tarde, aquí soy yo delante de Notre Dame. Media hora más tarde, aquí soy yo delante de la Torre Eiffel. Media hora más tarde todavía, aquí soy yo sobre mi tazón de sopa de cebolla francesa auténtica. El sujeto no es más que "yo yo yo". Es difícil de creer que alguien ve dónde están, ve que no sea su propia imagen reflejada en diversas piscinas nada.
No tengo nada contra el autorretrato, ni tengo nada en contra de los viajes que documentan. Y, francamente, cuando se viaja, no estoy tan seguro de cualquier viajero está tan lejos del eco de la amada . Todos queremos demostrar dónde hemos estado.
Pero más allá de los aspectos técnicos de luz y velocidad, sin embargo, el talento de un fotógrafo es una comprensión de la profundidad. No sólo la profundidad de campo profundo de idea. Un fotógrafo de retratos entiende cómo la luz y la sombra crean emoción y la evocación. Un fotógrafo de la calle no puede cumplir con cualquiera de las personas que terminan en el visor, pero sabe el ambiente de ajetreo urbano. Una profundidad de penetración basado en la experiencia; la profundidad de saber que muy pequeño detalle o sombra puede hacer un cliché en algo extraordinario, único y verdadero.
Es fácil menospreciar, a continuación, el teléfono celular autofotos que asumen desde una posición de experiencia y comodidad (si no el talento). Pero ¿qué pasa cuando nos encontramos el turista? ¿Y cuando nos encontramos atrapados en un horario que no está impulsado por la estética? ¿Qué pasa con los días nos encontramos en un lugar que nunca hemos estado, incluso sin la gracia de una misión para dar a centrarnos y propósito? ¿Y cuando nuestro verdadero talento, una apreciación de la profundidad, no tiene profundidad para confiar en ella?
El problema con la Mona Lisa es que se ve exactamente como la Mona Lisa. Hemos visto que el tiro antes. La Torre Eiffel se ve exactamente como la Torre Eiffel. En la vida real, la Ópera de Sydney parece que cada página del calendario kiosko centro comercial que hemos visto. Y ese es el problema con la autofoto, también. Nuestras caras a menudo se parecen mucho a nuestras caras. No hay nada sorprendente en absoluto. Incluso las bolsas jet-lag bajo nuestros ojos son un cliché.
¿Asi que que hacemos? ¿Qué podemos ofrecer eso es mejor?
El consejo es simple: fotografiar su curiosidad, su deseo de fotografiar.
Tiendo a llevar a una lente inusual. Más a menudo que no, mi caminar-alrededor de la lente gran angular es una Sigma 8-16mm porque cuando estoy de viaje que es como lo veo.Paisaje urbano enorme. Paisaje enorme. Cielo enorme. No es un objetivo muy rápido y sí, los bordes son extraños. Pero eso es mi "autofoto" - no me per se, y no a la Torre Eiffel que sabemos. Esta es la Torre Eiffel para mí y la opinión de mi auto del mundo.
Mi curiosidad no se centra en la única cara o momento íntimo. Mi propia experiencia es con sabor por lo amplio que puedo ver. Cuando puse la cámara en mi ojo, lo que veo es una imagen según se informa en la auto-conciencia artística como la luz y la forma.
Por lo tanto, una buena fotografía turística es un universo retirado de la autofoto desconsiderada. Un teléfono celular elevada frente a algo que otra persona ha dicho es importante es, en el mejor, un reflejo plana. Es toda la superficie, que carece de profundidad y misterio y, quizás lo más importante, el verdadero deseo.
La buena fotografía turística es único. Puede ser defectuoso en cientos de formas técnicas, sino lo que se hace bien, sin embargo, es una idea de alma creativa del fabricante.
-W. el scott Olsen
W. Scott Olsen es un profesor de Inglés en la Universidad de Concordia en Moorhead, Minnesota, donde también dirige la revista literaria Ascenso . Su libro más reciente es Un minuto con un extraño: Fotografías y Ensayos en el hogar y en el extranjero .

martes, 19 de abril de 2016

ESPLÉNDIDAS FOTOGRAFÍAS DE BAILARINES DE BALLET PRACTICANDO EN LAS CALLES DE CUBA

La última serie del fotógrafo Omar Robles tiene imágenes majestuosas de bailarinas de ballet practicando en las calles de Cuba.


sábado, 16 de abril de 2016

Surrealismo y fantasía en las increíbles imágenes del fotógrafo ucraniano Oleg Oprisco

Articulo de Adrián Morillo 
Oleg Oprisco es un fotógrafo ucraniano que ha ganado gran popularidad a raiz de sus fantásticas y oníricas imágenes, en las que juega con la composición, el color y cierto surrealismo que le han ido dando una identidad propia. 

Lo primero que destaca del trabajo de Oprisco es la cantidad de detalles de sus fotografías, no por sobreabundancia, pero si por que cada una de sus imágenes está cuidada al milímetro y cuenta con pequeños detalles que la hacen única a la vez que le dan un toque fantasioso y surreal. Y para nuestra sorpresa, todo lo que vemos es real, ya que Oprisco trabaja con una vieja Kiev 6C con la que dispara usando carrete de formato medio. Y si, algo de retoque hay para corregir imperfecciones, pero nada se añade mediante el ordenador. Esto le implica trabajar en la escenografía de sus imágenes con mucho tesón, ya que Oprisco es un fotógrafo solitario que no cuenta con asistentes a la hora de realizar sus imágenes. 
ver imagenes y más información en: 

viernes, 15 de abril de 2016

Valorar Fotografías Objetivamente (…o, al Menos, Intentarlo)


La fotografía, como todo arte, tiene su parte subjetiva y lo que a unos gusta, a otros puede que no tanto. Es cierto que existe una parte de la fotografía que sí puede ser valorada objetivamente, me refiero a la parte más técnica, aquello relacionado con la exposición, por ejemplo. Sin embargo, si el artista quiere romper con estas reglas y exponer de una manera "no ordinaria" para llegar a expresar lo que quiera con sus imágenes, en principio, no parece que se le pudiera decir que su fotografía está mal hecha. Entonces, ¿no se puede valorar una fotografía de manera objetiva? Poder hacerlo sería bastante útil, sobre todo para el proceso de aprendizaje. Por esto, hoy vamos a ver una posible manera de valorar de manera objetiva nuestras fotografías, veremos qué debemos observar, cómo valorarlo y para qué nos puede servir.
¿Qué Podemos Mirar en una Fotografía para Poder Valorarla de la Manera Más Objetiva?
Ya sabemos que una imagen es una gran suma de factores: los hay técnicos (como la exposición, la iluminación, la composición) y los hay emocionales (la historia que hay detrás de la toma), entre muchos otros. Así pues, parece que un método razonable para valorar una fotografía de la manera más objetiva posible debería diferenciar los distintos elementos que la conforman. Si aprendemos a apreciar y valorar cada punto de nuestra imagen de manera individual, examinar una fotografía (y una obra de arte en general) nos será mucho más fácil. Vamos a ver qué puntos pueden ser interesantes examinar para poder apreciar una imagen de manera objetiva:
  • Técnica. Se trata de observar cómo ha jugado el fotógrafo con la exposición. ¿La fotografía está bien expuesta? ¿Ha utilizado bien el diafragma, la velocidad y la sensibilidad? Si se trata de una fotografía de un movimiento, ¿está bien captado y representado? ¿La profundidad de campo es la adecuada?
  • Composición. Para analizar este punto, toca traer a la mente las numerosas reglas de composición fotográfica que existen. ¿Hay un punto de atención en la imagen? ¿Este punto de atención está situado en uno de los puntos fuertes de la composición? ¿Hay líneas que guíen la mirada por la imagen? Si las hay, ¿guían la mirada adecuadamente ayudando al ojo a desplazarse por los puntos más importantes? ¿Están repartidos los pesos visuales de manera adecuada? ¿O quizás uno de los lados de la imagen está más cargado que el otro? ¿Puede ser que el autor haya decidido romper con alguna regla? ¿Ha sido premeditado o por casualidad? ¿Esto ayuda a la imagen o la hace más confusa? Como ves, hay tantas preguntas para hacerse como tiempo dediques a observar la foto.
  • Valor. Aquello que se ha retratado, ¿qué valor tiene? ¿Es una imagen de algo original? ¿O de algo cotidiano? ¿Lo que se retrata es algo importante? ¿O es simplemente otra manera de ver las cosas? ¿Ha sido un momento fugaz? ¿O algo que siempre está ahí? En resumen: ¿lo retratado tiene valor? ¿O no es lo más importante de la fotografía (siendo lo principal otros elementos como la composición o la técnica)? Este es, quizás, el elemento más subjetivo de toda la fotografía. El que más costará valorar objetivamente. Aquí entran las sensaciones, lo que te hace sentir la imagen. ¿Quiso el autor transmitirte algo? ¿Lo consiguió?
  • Habilidad. ¿Ha sido una fotografía fácil de tomar? ¿Ha habido un poco de suerte por en medio? ¿Cualquiera podría tomar esa imagen? ¿Son necesarios conocimientos o aptitudes especiales para poder conseguir ese resultado?

Siguiente Paso: Valorar la Fotografía

Ahora ya sabemos qué elementos vamos a mirar y analizar. Toca dar el siguiente paso: valorar. Quizás sólo con plantearte las preguntas que hemos ido diciendo ya te hagas una idea de si la fotografía en cuestión objetivamente es buena o no tan buena. El caso es que, si queremos ir más allá, podemos inventarnos un sistema de puntuación para hacerlo todavía más "matemático". Como he dicho en la introducción, la fotografía (ni cualquier otra disciplina artística) no puede valorarse 100% objetivamente porque en ella se mezclan aspectos técnicos y aspectos emocionales (que son los que más se escapan de un esquema de puntuaciones). Aún así, hacer el ejercicio de intentar estudiar una fotografía separando todos sus elementos como ya hemos visto (o de otra manera parecida) puede ayudarnos mucho a la hora de saber por qué una imagen está tomada como está tomada. Y eso nos puede ayudar a evolucionar en nuestra propia manera de ver y vivir la fotografía. Así que, una vez analizados los distintos puntos analizables de una fotografía, podemos intentar ponerle una puntuación independiente a cada uno de ellos
 · 18 FEB 13
http://www.dzoom.org.es/un-metodo-para-valorar-fotografias-objetivamente-o-al-menos-intentarlo/


lunes, 11 de abril de 2016

Kedada de Generaleros en Tarragona 09/04/2016

Esta vez nos hemos lucido de lo más, hicimos una Kedada con Generaleros  que vinieron de lejos....... Madrid, Castellon, Manresa, Vilanova y Barcelona para vernos, conocernos y disfrutar en Tarragona.
Sabemos que muchos no pudieron venir por temas de salud, de trabajo, etc, por lo que seguro vamos a repetir.
Aquí os dejamos un resumen para que veáis realmente que en Cia General de Fotos nos gusta la fotografía pero también nos importa la gente.


lunes, 4 de abril de 2016

Saul Leiter, genio del color y el Otro Saul Leiter: retratos en blanco y negro

De tanto en tanto en la historia de la Fotografía callejera (también denominada Street Photography) surgen figuras que lo ponen todo patas arriba, como una ráfaga de viento que entra por la ventana desordenando todo lo que tienes perfectamente colocado y que das por válido: fotografía las calles en blanco y negro, con una focal corta, desde cerca, con el foco justo allí donde se espera, en el momento decisivo…
"Hay cosas que están a simple vista y hay cosas que están ocultas 
y tal vez la vida, el mundo real, tienen más que ver con lo que está oculto. ¿No creen?"
Saul Leiter.
Eso es poco más o menos lo que sucedió cuando descubrimos a Saul Leiter, un fotógrafo con alma de pintor que llevaba décadas fotografiando las calles de su entorno más próximo, aplicando a la Fotografía lo que le había enseñado la pintura, construyendo imágenes que desafiaban todo lo que se había visto hasta entonces mientras rehuía el primer plano de la actualidad y la fama, manteniendo una independencia envidiable para, al final, enseñarnos que dedicar la vida a nuestra pasión merece la pena, aunque el premio sólo nos satisfaga a nosotros mismos.
  • Aquí tenéis los enlaces donde vale la pena hacer un recorrido por la explicación y las bellas fotografías que aparecen.





sábado, 2 de abril de 2016

La Galeria Ana Mas Projects exhibe al Miserachs menos conocido

La galería presenta 80 copias de época con una selección de trabajos poco vistos y algunos inéditos   del 02/04/2016 - 17/06/2016

'La bòbilia de Llinars', Miserachs tomó la imagen con solo 15 años. 
Pese a que la gran antológica de Xavier Miserachs (1937-1998) sigue pendiente, las exposiciones de su obra se suceden esta temporada. Tras cerrar el lunes la que le ha dedicado desde septiembre el Macba, este sábado abre la que le brinda la galería Ana Mas Projects. Una exposición, esta última, muy diferente a la de la plaza dels Àngels tanto en forma como en contenido. Si en la primera se puso el foco en el fotolibro 'Barcelona, blanco y negro', en estala mirada se abre a todos los trabajos que realizó el que fue uno de los máximos exponentes de la vanguardia fotográfica de los 60. Y aquí, a diferencia del Macba, sí se exponen copias. Con todo, "no hay la pretensión de hacer de contrapunto", afirma la galerista. Y es que la del Macba no fue una exposición ortodoxa ni gustó a ciertos sectores. "La cicatriz está cerrada", apunta Arena Miserachs, hija del creador, que si algo cuestiona es que se mostró al Miserachs más conocido, el de las imágenes de Barcelona.
Algo muy distinto a lo que plantea la galería con un conjunto de 80 imágenes agrupadas con el objetivo de "dar una visión de los intereses de Miserachs y de su personal mirada", a juicio deFrederic Montornés, coordinador del proyecto; y que "abarca aspectos desconocidos para el público general". Así, hay imágenes de Barcelona, sí, pero también de la mili, del campo, de la Costa Brava y de señalética, una de las "obsesiones" de Miserachs, vistas sus imágenes, explica Montornés. Y también de El Molino, una serie poco vista y que para la hija del fotógrafo ha sido un gran descubrimiento. Esta, junto a un autorretrato del 60 son sus favoritas. La primera por desconocida, la segunda por motivos sentimentales.
LA PRIMERA IMAGEN CON 15 AÑOS
Las copias que se exponen son todas de época o salidas a posteriori de la mano del fotógrafo, y un 30% son inéditas. Se han inventariado hace poco y forman parte del legado familiar. Un archivo "no muy extenso" porque en los 60 las copias no se valoraban y guardaban. Y un archivo muy diferente al depositado en el Macba en el 2011 que incluye solo negativos y contactos.
El recorrido lo abre la que puede considerarse la primera imagen con intención que hizo Miserachs. Fue en el 52, con 15 años y con la cámara de su madre. La fotografía muestra la Bòbila de Llinars, pueblo donde veraneaba la familia, y Miserachs la presentó a un concurso. No ganó. Pero eso no le hizo desistir y siguió fotografiando hasta que en quinto de Medicina dejó los estudios agarró la cámara y ya nunca la dejó.

--El periódico.
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